quizas por que, no soy un buen poeta puede pedierles que se queden quietos hasta que yo termine estas palabras.... quiza por que no soy de la nobleza puedo nombrame le Roi de Montreal con mi corona y espada de cartulina, de la orden de Julien de las maravillas.
Si los de la vanguardia sabrán de donde vienen las palabras que hago mías, igual esta historia es así de sui géneris.
Buenas!
Todavía tengo la vívida memoria, cuando ese 11 de marzo 2012 el avión venía descendiendo sobre Montréal, veía el estadio olimpico y trataba de visualizar el pequeño estudio que iba a rentar sobre la rue Hochelaga.
Lo único que me le pedía a dios era que me dejara conquistar esta ciudad, y como ven ya soy el rey de papel.
A un año de mi desembarque normando, sigo muy emocionado y muy contento conmigo mismo por haberme dado la oportunidad; ya sé que de viejo no me voy a reprochar no haber vivido esta aventura.
Hoy día, estas vacaciones disfrasadas de esperanza en radicar en estas tierras, dejan atrás su carácter de ambiguedad y el trabajo se muestra cada día más constante, revelando así bases muy sólidas para poder sentir esta nación como nuestra.
Un año que no converso cara a cara con mi mamá, que no siento el abrazo de mi papá, de no coincidir en pensamiento con mi hermana Natalia (igual la amo), de aprender de Fanny, de no regañar a Pamela, de no tomar cafe donde Abuela Yolanda, de no hablar con tio Franklin, de no reir con mis sobrinas, de no jalarle la cola a chalo (ese gato es malo), de no revolcar a jacky en el suelo, que no sufro/rio en el morera, que no como arroz cantones con un pezcado en salsa de ostiones, que no me bailo a tico en la cancha de la casa de Mau Castro, que no quedo con el gordo para hacer un asado en mi casa, que no siento la sensación de viajar al campo de Costa Rica, que no tengo en mis pies el agua de mar entre mezclado con la arena, en fin son muchas cosas que de pronto valoraré más cuando las tenga al frente.
Por otro lado; tengo un año de probarme día a día que no me quiebro, que voy con el viento acomodandome y sacando provecho lo mejor que puedo; tambíen un año que hago vivídas las imagenes de estampilla al pasar por cada lugar que descubro al lado de mi familia, un año de tratar en verdad de llegar al padre por medio de su hijo jesucristo; un año de seguir queriendo más buscando las maneras correctas para lograrlo, de seguir planiando a futuro trabajando en el día de hoy para conseguir lo que deseo.
Como podrán ver, en la vida hay que sacrificar cosas preciadas para llegar o al menos intentar cosas superiores.
Que me traerá el año 2... lo que tu quieras señor, solo ayúdame a mantenerme fuerte al lado de los mios más proximos, mi pequeño universo de alegría y mi amada divina, que decidio hacer suyo este sueño tambien.
Slds, Sonny
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